Autor: Miranda Rubio, Francisco
Localización: Príncipe de Viana, ISSN 0032-8472, Año nº 55, Nº 201, 1994 , págs. 157-178
Fuente: Biblioteca Navarra Digital, Dialnet
Marrón a la provincia de Álava, azul a la de Logroño y verde a la de Zaragoza. |
Por el decreto publicado el 27 de enero de 1822 por las Cortes españolas durante el Trienio Constitucional, se dividía el territorio español en cincuenta y dos provincias. Según dicho decreto se creaba, entre otras, la de Logroño y, lo que es peor, se recortaban los límites de Navarra en favor de sus provincias limítrofes: Logroño, Zaragoza y Álava, de tal suerte que se agregaban a la de Logroño las localidades de Cintruénigo, Corella, Castejón, Fitero y Viana (en azul en el mapa); a la de Álava (en marrón), los pueblos de Cabredo, Marañón, Lapoblación, Genevilla y Zúñiga, y a la provincia de Zaragoza (en verde), las localidades de Cortes, Buñuel, Ribaforada, Fontellas, Urzante, Pedriz, Ablitas, Tulebras, Barillas y Pitillas. En restablecimiento del absolutismo en 1823 hizo que esta reforma quedara en dique seco hasta que murió Fernando VII. Será a partir de la muerte de éste, en 1833, cuando de la mano del ministro de Fomento Javier de Burgos, quedó dividida España en cuarenta y nueva provincias, desapareciendo algunas nuevas que se habían creado en la división de 1822 como Játiva o Vigo, y manteniendo los límites de Navarra que se habían establecido en 1822.
Sin embargo el decreto no se llevó a cabo en Navarra, a pesar de la insistencia de Logroño en que se cumpliera tal decreto, y de que en la propia Viana había partidarios. En 1841, durante la regencia de Espartero, se restablecía nuevamente la demarcación de los límites de Logroño, olvidándose de los deslindes de Álava y Zaragoza.
Ver también en este blog "Saturio de Dávalos y Beaumont" y "Viana fue provincia de Logroño".